JULIE BAUM LA PRIMER MUJER EN CASARSE EN LA ANTÁRTIDA BRITANICA

Publicado el 11 enero, 2023 |

“Una boda muy blanca rodeada del frío de la Antártida pero con el calor humano de dos enamorados.”

Se trata de la boda de Julie Baum quien nació en Birmingham, con 34 años de edad y Tom Sylvester quien nació en Sheffield con 35 años de edad.

Fueron seleccionados para unirse al British Antarctic Survey para gestionar expediciones científicas de campo profundo y fueron quienes protagonizaron la primera boda realizada en el territorio antártico británico en Julio de 2017.

El vestido que utilizó Julie Baum fue realizado con una tela especial. Su falda fue hecha con una lona naranja del mismo material que utilizan para las tiendas de la Antártica, dicho color se asemeja a los vestidos de novias que utilizaban en la antigüedad.

Dejando a un lado el vestido blanco tradicional, y además el vestido no fue lo único hecho a mano en esta boda, pues los anillos de compromiso fueron hechos por el novio Tom Sylvester con latón y un torno.

Julie y Tom, ambos entusiastas de la montaña, se conocieron en un programa de prácticas hace 11 años y se comprometieron en 2014.

Una boda muy blanca rodeada de frío pero con el calor humano de dos enamorados

Julie y Tom trabajan juntos en la estación de investigación Rothera, ubicada en la isla Adelaide, al oeste de la península antártica. Lugar que fue escogido por la pareja para contraer matrimonio bajo las inclementes temperaturas del lugar donde alcanzaron a descender a diez grados bajo cero, todo esto junto a sus compañeros de trabajo y amigos.

Quien los casó fue el magistrado y líder de la estación Rothera Paul Samways.

El líder de la estación de investigación Rothera y el magistrado del Territorio Antártico Británico (BAT), Paul Samways, quien presidió la ceremonia dijo: “Habiendo pasado tiempo con Julie y Tom durante el verano y la mitad del invierno antártico, me siento increíblemente privilegiado de poder ser parte de su historia. Son personas increíbles, y ser responsable de unirlos en matrimonio es un honor increíble”.

Finalmente Julie menciona que: “Casarse en la Antártica se siente como si estuviera destinado a ser. No hay un mejor lugar…”.

Tom agregó: “Siempre quisimos tener una pequeña boda personal. Pero nunca imaginamos que podríamos casarnos en uno de los lugares más remotos de la Tierra”

Sin lugar a dudas esta pareja nos enseña que no existe excusa alguna a la hora de contraer matrimonio, cuando dos personas están destinadas a estar juntas no importa ni siquiera el inclemente clima al que pudieran estar expuestos que evite la unión de estas dos personas.